viernes, octubre 13, 2006

historia de la escatología

tengo un gran curriculum en el baño. yo para cagar siempre fui especial, mis historias son múltiples y singulares. debe ser que algo quedó de la infancia, una etapa suspendida en el aire, por lo que todavía quedan reminiscencias que poder contar. para empezar podemos decir que sigo siendo del grupo afortunado de personas que puede cagar en casi cualquier parte. obviamente que en una pendiente se me complica y las letrinas esas de cagar de pie me dan cierto resquemor, asi que si podemos evitarlas mejor. pero es verdad que hay gente que sólo puede cagar en su casa o algo que parece su casa, solamente. es terrible como debe sufrir esa gente, y pensar que es la gran mayoria de las personas.
otra de las caracteristicas que me caracterizan es que no tengo pudores al hablar del cagar y de la mierda. hay gente que tiene pudores, pero por ahi no los tiene para hablar de otros temas, por ejemplo de sexo. yo no tengo pudores para hablar de sexo, sólo que no tengo mucho que decir. pero tengo pudores para hablar de fútbol, de cocina y de la paz en el mundo. y de arte, por supuesto. menos mal que a nadie le interesa mis ideas sobre el arte, igual no se las diría a ninguno.
debe haber sido una insuficiencia en el aparato digestivo, pero desde que sé que tengo uso de tazón y tengo memoria, me agarra la diarreíta una vez al mes masomenos. como una cosa que necesita limpiar todo. lo peor es cuando te viene sin avisar, así de la nada, cuando estas en lo mejor y llega la irregularidad. cuando por ejemplo tenes ocho años y estas jugando a la pelota en el medio de un parque y el baño más cercano está a un kilómetro. y salís corriendo y pensas que llegas pero el baño en vez de acercarse se alja más y más. y cuando estás a la puerta del baño sucede lo inevitable.
mis historias con la caca son múltiples y singulares. una vez fui a visitar a mis amigos y hice lo que hago siempre que los voy a visitar. ese día era de gran reunión porque era cumpleaños de alguno. y salgo de baño y eran cincuenta personas esperandome coreando un tema de serrat en la parte que dice "van a cagar a casa de otra gente". todos reían. yo les dije "no se preocupen, también voy a ir a cagar a la casa de cada uno de ustedes", y así fue, poco a poco fui bautizando todas las casas, que para mi es el signo de una gran amistad. cuando puedo cagar en la casa de alguien para mi se traduce "este va a ser un gran amigo". y conservo exclusivamente esas amistades. vos que estas leyendo esto, te digo, también cagué en tu casa, y te quiero tanto.

1 comentario:

Unknown dijo...

cuando preparabamos literatura espaniola eh, sisi, fue ahi picaron, jejje

p.d. que bueno, lo de la cancion de serrat es cierto? suena traumatico, lindo que lo digas, lo importante es que te laves las manos despues, lo demas es secundario, un abrazo campeon,

M.