martes, mayo 16, 2006

voyager

estoy por arrancar un libro de viajes de magris. que linda que es la ilusion de empezar un libro nuevo. ayer terminé de leer una de esas novelas cuatrocientospaginescas decisivas para la historia de la humanidad. no importa. me gusto el final, me gusto el final incierto, final sin final. me hace acordar a una anecdota de mi infancia, cuando senti a una piba revelarme el color transparente diciendo "color sin color".
el tema con los libros de viajes es que cualquier tema va bien. uno viaja y es un divagar (los fans de la odisea le llamarian "ese errar"), y uno escribe y divaga y viaja. y el tema que aborde va a estar bien a priori. porque es un libro muy personal, y los temas de los que uno siempre se ocupa son muy personales. despues de todo, a quien le importa las cosas tan personales del otro. no deberian hacer ediciones de libros de ese tipo. me refiero a cualquier libro. la verdad es que la industria del libro es un poco apabullante y asqueadora. el mercado del libro es un mercado mas. y eso a pesar de todo lo lindo que tiene un libro. yo amo los libros, quiero tener una biblioteca mundial. pero cada libro tendria que ser un individuo por si mismo, no tendria que tener un igual. en todo caso dos libros iguales deberian tener por lo menos una encuadernacion diferente, y por eso es que ahora estoy estudiando tanto de encuadernacion. ahora me doy cuenta. no quiero dos libros iguales en mi biblioteca mundial.
el tema de la biblioteca mundial es algo muy personal de lo que no voy a entrar en detalles porque ellos estan escritos en mi libro personal del que no voy a entrar en detalles. pero lo que nos ocupaba, eso de los viajes. que lindo eso, no? que lindo viajar, no? yo no puedo decir que haya viajado mucho ni tanto, pero tengo el orgullo de conocer algunos lugares, algunas ciudades. y tengo la ilusion de seguir conociendo ciudades. somos ciudadanos del mundo, tenemos derecho de conocer las ciudades, tanto derecho como el que tenemos para divagar. yo por lo general divago. no me importa. me meto en una ciudad y camino por una calle y en una esquina que se me canta doblo, a derecha o a izquierda. y sigo caminando. si quiero ver la arquitectura de cierto duomo se que solo tengo que seguir caminando y por ahi preguntarle a alguien no esta mal, y llego al duomo que es como el lugar donde estan todos, que es en la literatura de viajes como si fuera un tema visitado por todos, pero despues sigo caminando y me ne frega para donde va el resto, si van al museo de la academia.
debe ser por eso que me gusto tanto venecia, la ciudad laberinto. asi le llamaban ayer a venecia, ayer, en realidad ayer lei justo una parte de esa novela genial y resulta que un personaje viaja a venecia y le llaman la ciudad laberinto. ya se deben haber dado cuenta de que novela hablo. preciosa, mandenle saludos mios, la deje ayer y hoy la llevo a la biblioteca comunar a devolverla.
las bibliotecas comunales me tienen sin ciudado. me parecen algo re util y lindo y todo eso. yo quiero tener una biblioteca mundial, a ver si se entiende. como van a venir a visitarme todos cuando la tenga! todos van a querer ser mis amigos. ya se, en realidad nadie vio a alguien tan ambicioso como yo, por eso se sienten orgullosos de ser mis amigos. todos me quieren tanto. "hay mucha hipocresia", hijo, me dijo una vieja y me agarraba la mano. "y usted la tiene larga" me dijo la misma vieja, "la hipocresia". me gusta la gente sincera, que no tiene problemas de decirme en la cara ese tipo de cosas, hipocrita, gil, boludo de mierda, ponele etcetera. no digo que se equivoquen. se que soy muy maligno, y muy benigno. lo digo como para que me vayas conociendo, vistes.
pero el mundo esta lleno de giles. volviendo al tema que nos ocupan, los giles van del duomo al museo de la academia. lo lamento por ellos. ellos se pierden la posibilidad de perderse en la ciudad, de recorrerla en los recovecos mas insospechados. tampoco es que una ciudad tenga tantos recovecos insospechados. pero cada ciudad tiene sus crimenes y sus criminales. y sus turistas. los turistas son criminales de otras ciudades, seguramente. "cada ciudad tiene sus putas", dijo el marido de la vieja. el tipo era mas bien joven. decia que habia recorrido el mundo pero en realidad era la vieja la que habia recorrido, que es como decir "corrido mucho".
las ciudades, amo cada ciudad que he conocido. amo cada ciudad menos roma. pero algun afecto le tendre a roma. pero a las demas ciudades las he recorrido, les he pasado el dedo en la espalda, las he acariciado con mi lengua y con mi aliento. digo que he penetrado en ellas, y ellas han gozado conmigo. y no me voy a perder de seguir conociendo otras ciudades, y no respondo por los celos de nadie.
es que para construir una biblioteca mundial hay que empezar por conocer el mundo. pero a veces a esos silogismos no los entiendo.

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